Cómo evitar que una reunión/presentación se vuelva monótona
Piénsalo, cuando alguien te cuenta una historia quieres que te lleven con él, quieres sentir la emoción y escuchar el significado detrás de cada palabra. Un orador monótono rompe todos los esquemas. En primer lugar, quiero dejar claro qué es la monotonía. En latín, "mono" significa "único", mientras que "tonos" se traduce como "tono". Hablar con un solo tono aburrirá a tu audiencia, así que aquí tienes algunos consejos para dar una presentación monótona.
La postura es la clave
Una voz fuerte y apoyada es crucial para una buena presentación vocal, pero esto sólo es posible si se tiene la postura correcta. La caja torácica debe estar alineada para que entre suficiente aire. Antes de empezar la presentación, asegúrate de tener la espalda recta y relajada, las rodillas algo flexionadas y la cabeza alta. Debes estar en línea vertical y experimentar lo fácil que es hacer que tu voz tenga fuerza y apoyo.
Tu voz debe ser tu resaltador
El mayor problema de un discurso monótono es la falta de entonación. Si no lo haces de forma natural, puede ser un reto añadirla a tu voz. Del mismo modo que resaltarías toda la información importante en un gran trozo de texto, también deberías hacerlo en tu presentación. Las palabras que se destacarían si se leyeran tienen que tener un tono diferente cuando se hablan. Mezcle el ritmo, la entonación y el volumen para resaltar su mensaje clave. Utilice la regla del puño de pronunciar al menos una palabra diferente en cada frase para no aburrir a su público.
Elogie su ritmo
La gente empezará a extrañarse cuando el presentador hable con el mismo ritmo repetitivo, igual que uno no escucharía una canción que es una repetición constante de los últimos acordes. Mezcla tu ritmo. Por ejemplo, puedes ir más despacio cuando se da información importante, así el público puede procesarla. Por el contrario, puedes acelerar cuando estés recitando una lista larga que no sea tan importante. Otro truco para variar el ritmo es hacer pausas. Al hacer una pausa antes de un mensaje importante, la gente empezará a preguntarse qué vendrá después y prestará más atención. Por otro lado, también puedes hacer una pausa después de un mensaje importante, así la gente tendrá tiempo de pensar y procesar lo que acabas de decir. El silencio también puede servir para estructurar tu presentación. Haz una pausa entre cada párrafo para que el público sepa que vas a tratar un tema diferente.
Sobrecarga de expresiones
Las presentaciones monótonas pueden frenarse mostrando más expresividad en general. Aunque la tonalidad vocal es la principal herramienta para la expresividad, existen algunas otras opciones. La práctica demuestra que cuando un orador aumenta los movimientos corporales, las expresiones faciales o el vocabulario animado, la tonalidad vocal le sigue automáticamente. Así que si le cuesta cambiar su voz monótona, empiece a moverse más, haga gestos con las manos o incluso pruebe a mostrar emociones en las palabras que dice.
Dejar de presentar y empezar a hablar
Está en nuestra naturaleza hablar con mucha expresión cuando mantenemos una conversación con alguien. Aproveche este instinto natural iniciando una conversación mientras presenta. Cuando empiezas a hablar en lugar de presentar es más probable que hables con un tono, volumen y ritmo diferentes, y de esta forma es muy poco habitual que hables de forma monótona. Hay algunos trucos para iniciar una conversación en tu presentación. Cuando estás en una conversación no tienes ningún truco, así que ¿por qué los utilizas durante una presentación? Empieza a hablar del tema que se te pasa por la cabeza, así será más difícil que hables monótonamente. En segundo lugar, mantén una conversación real con tu público. Utiliza nuestra herramienta de preguntas y respuestas, con ella el público puede hacer preguntas durante toda tu presentación. Estás obligado a responder a estas preguntas con la guardia baja, lo que dará lugar a interacciones sorprendentes y te ayudará a salir de la monotonía.
Con todos estos consejos la monotonía dejará de ser una lucha para ti. ¡Empieza a practicar y experimenta el valor añadido de ser un gran presentador!
Robert Daverschot
Robert es moderador profesional, presentador y coach de oradores. Robert tiene años de experiencia en su país y en el extranjero y trabaja para una amplia gama de sectores. Ha entrevistado a ministros, capitanes de la industria e incluso a Su Santidad el Dalai Lama. En su trato con el público, siempre utiliza Sendsteps. Con él, el público puede expresar sus opiniones, por lo que los asistentes pueden emitir votos o enviar comentarios a los ponentes y paneles en el escenario. De este modo, los actos se convierten en animados diálogos en los que todo el mundo puede expresarse.